Anthony González, quien se encuentra en condición de indigencia en Skid Row, no desayuna. Almuerza donde puede, muchas veces comida china y cena lo que encuentra, a veces pizza o sandwich de queso.
“Me gusta mucho la comida china, es lo que más como”, comentó Anthony, quien desde enero duerme en el albergue de Union Rescue Mission (URM), en el centro de Los Angeles.
Por lo general, las personas sin hogar se alimentan de comida alta en grasas saturadas y con poco valor nutritivo porque no tienen una cocina donde preparar sus alimentos y compran lo más barato, explicó Andy Bales, director ejecutivo de URM.
“Cada vez son más las personas que no tienen un lugar o dinero para preparar sus alimentos. En febrero rompimos el récord en la cantidad de comida que preparamos. Nunca antes habíamos preparado 4,896 comidas al día, por lo general son alrededor de 3,700″, explicó Bales.
Para ayudar a estas personas que buscan comida preparada en el albergue de Skid Row, URM y la empresa Herbalife iniciaron ayer un programa de nutrición que ofrecerá un licuado de proteínas cada mañana.
Herbalife donará un batido por persona para ser distribuido junto con el desayuno.
“Nuestra compañía ha sido bendecida con ganancias en estos tiempos de inseguridad financiera, y nuestra convicción de que debemos ayudar para que nuestras comunidades sean saludables y mejores, nos ha hecho crear una alianza con esta organización que hace un gran trabajo con la gente de Skid Row”, dijo Michael Johnson, director ejecutivo de Herbalife.
Johnson agregó que la comida menos saludable es la más barata y por eso hay una epidemia de obesidad entre la población, principalmente entre los indigentes, ya que compran papas fritas en lugar de fruta y una hamburguesa en lugar de verduras.
“Es muy triste cuando vemos a la gente cenando donuts, que solamente tienen carbohidratos malos y grasas saturadas”, manifestó Johnson. “Si ellos no pueden encontrar alimentos que les den la nutrición que necesitan diariamente, en el licuado del albergue lo encontrarán”.
El licuado que recibirán los indigentes contiene más calcio que 6 onzas de yougur, más proteínas que un muslo de pollo, más vitamina A que un mango, más vitamina C que un plátano, más fibra que media taza de brócoli y más hierro que media taza de frijol negro.
Cuando haya fruta disponible se le agregará al batido. Cada mes variará el sabor de la bebida. El sabor de este mes es Cookies & Cream (crema y galletas).
Después de tomarse un vaso de unas 8 onzas de este batido, a Anthony aún tiene dudas sobre su valor nutritivo.
“Dicen que es saludable. No sé. Me lo voy a tomar porque dicen que es bueno. Me gusta el sabor, aunque no sé si me gustará tomarlo todos los días”, dijo Anthony con escepticismo. El asegura que aún prefiere la comida china.
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